1.- A través de Change.org la ciudadanía puede conseguir que se generen cambios concretos. ¿Cuál cree que es hoy el poder de la ciudadanía para cambiar realidades? ¿Es siempre desde la protesta o el reclamo? ¿Cuál es el impacto real que puede generar Change.org? Mencionar si es posible algunos ejemplos concretos.
Creo que la ciudadanía nunca ha tenido tanto poder como ahora. Hoy en día cualquier persona lleva un altavoz en el bolsillo: con su móvil pueden denunciar, apoyar, informar, aprender. Es maravilloso.
Y no hay una sola manera de generar cambios, pero la protesta, la reclamación, son sin duda una forma de cambiar las cosas, quizá la más habitual. En Change.org se crean, sólo en España, unas 2.000 peticiones al mes. Y tenemos muchos ejemplos de peticiones que consiguen los cambios que buscan. Peticiones como la de Carlos, un chico en silla de ruedas, que junto a las 75.000 personas que firmaron su petición convenció a la Federación Española de Fútbol que levantase la prohibición que no permitía a las personas con discapacidad ser entrenadores hasta grandes peticiones como la de Anna González, que perdió a su marido atropellado cuando hacía ciclismo, y con más de 320.000 firmas ha conseguido que se reforme el Código Penal para aumentar la protección de las víctimas de accidentes de tráfico, en particular las y los ciclistas. Pero no se necesitan tampoco miles de firmas. Tenemos decenas de ejemplos de campañas locales en las que con menos de 100 firmas se ha conseguido convencer a un Ayuntamiento de que no cierre una biblioteca, o se ponga un profesor de apoyo en clase a una niña con discapacidad intelectual.
Pero también se pueden cambiar las cosas simplemente con mejor información. Yo acabo de descubrir una aplicación con la que escaneo el código de barras de cualquier producto en el supermercado y te da la calidad nutritiva de ese producto. Con esa información podemos mejorar nuestra salud, y puede ayudar a prevenir problemas que ya son casi sociales como la obesidad o la diabetes. En EEUU hay organizaciones sociales de apoyo psicológico online a adolescentes que utilizan los datos de localización anonimizados que recogen para ayudar a ayuntamientos y estados a prevenir los suicidios juveniles, por ejemplo.
2.- ¿Cuál es el rol de plataformas como Change.org en relación con Gobiernos y empresas?
Change.org aspira servir de canal de comunicación y diálogo entre la ciudadanía y los gobiernos o las empresas a los que la ciudadanía les está exigiendo algo que creen justo. Ha costado que empresas y gobiernos viesen las peticiones no necesariamente como un ataque, sino como una oportunidad para escuchar y mejorar. Recuerdo por ejemplo la petición de Gabriela, una adolescente madrileña, a Ikea, pidiéndoles que tuviesen dispensadores gratuitos de agua en toda sus tiendas, para reducir el uso del agua embotellada que es tan nocivo para el medio ambiente. Pues Ikea le respondió fantásticamente, agradeciéndole la oportunidad de mejorar, explicando su compromiso con la sostenibilidad y comprometiéndose a instalar esas fuentes en las tiendas en las que aún no las había. Y todos felices.
3.- ¿Crees que en España hace falta un cambio de mentalidad?
Creo que ese cambio ya ha comenzado. Empresas y gobiernos ya son conscientes de que la ciudadanía quiere participar más, y si no establecen esos canales de diálogo, de escucha y respuesta, las personas buscarán otros modos de hacerle llegar el mensaje: desde crear una petición a denunciar en las redes sociales o simplemente, dejar de utilizar los servicios de esa empresa.
Iniciativas como Decide Madrid, los presupuestos participativos que han iniciado algunos ayuntamientos, o el hecho de que cada vez más empresas estén reduciendo su huella de carbono, o buscando formas de maximizar su impacto positivo en la sociedad, dan esperanza. Pero sí, hay que hacer más, y más rápido. Me gustaría que en España hubiese más inversión pública y privada en estos temas.
4.- ¿Cuál sería el gran Moonshot de Change.org?
Nuestra visión es un mundo en el que nadie se sienta impotente ante una injusticia. Ya tenemos una plataforma que permite a cualquier persona en cualquier lugar crear una petición y encontrar una comunidad de personas interesadas en ayudarles. Ahora tenemos que ir más allá y darles nuevas herramientas que permitan a esas comunidades llevar a cabo acciones conjuntas para avanzar sus agendas. Y ojalá también llegar pronto a regiones en que estamos menos presentes, como África ¡En ello estamos!
5.- Y el tuyo personal?
A mi me encantaría encontrar maneras de incrementar exponencialmente la participación ciudadana en las decisiones políticas a todos los niveles. Creo mucho en la fuerza de la colaboración y la inteligencia colectiva, y creo que los resultados de las políticas y la calidad de la democracia serían mejores si las instituciones se abriesen de verdad a la ciudadanía.
6.- Podemos pensar en un momento en el futuro donde no sean necesarias plataformas como Change.org? ¿Qué debería de cambiar?
Todo es posible, pero lo veo aún lejano. Si las instituciones y las empresas tuviesen canales reales de escucha y participación abiertos a cualquier persona, change.org sería menos necesario. ¡Ojalá!
7.- ¿Por qué no debería alguien de perderse esta nueva edición de SBMadrid 19?
Porque vamos a estar personas con mucha pasión por cambiar las cosas, y van a conocer iniciativas que están teniendo un impacto de verdad en crear un mundo mejor. Les prometo que saldrán con mucho optimismo y esperanza, que es lo que más falta nos hace hoy en día.